Yumbel (CL) Colegio y parroquia San Sebastián

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Datos

Demarcación Generalidad

(1886-1890)

Historia

Hay en la ciudad de Yumbel -Chile- un célebre santuario que data de 1655 en el cual se venera a San Sebastián. Adosado al templo un edificio, construido en 1879 por el obispo Mons. Salas y habilitado para colegio parroquial con el título de seminario, por razones administrativas-fiscales. El 20-2-1886 llegaban los primeros escolapios acompañados por el Sr. Vicario capitular, D. Domingo Cruz. Tomaron posesión de la iglesia y del colegio, despedían al párroco Bartolomé Pradeñas y a los colaboradores colegiales, Sres. Sepúlveda y Elgueta. El nuevo rector de la casa, P. Félix Sors redactó un amplio informe sobre las necesidades más perentorias de la obra. A modo de dato conviene indicar que dicho colegio-seminario no era más que una sencilla escuela rural y con muchas deficiencias. Por otra parte la actividad parroquial resultaba novedosa para aquellos escolapios y además se veía agravada por las leyes de laicización promulgadas en el país, y el adecentamiento de los lugares propios de la comunidad era necesario y urgente. Para todo y en todo recibieron permiso, apoyo e, incluso, aporte económico del Sr. Cruz. Viendo lo muy útil que resultaba y esperaba ser la presencia de escolapios en América se solicitó del P. Vicario general en España, Manuel Pérez, un nuevo grupo de religiosos; petición que fue escuchada, aunque no en el número deseado. Con los nuevos religiosos se reajustaron las comunidades; y en concreto se envió a Yumbel el grupo proveniente de la Provincia de Cataluña (PP. Sors, Cuixart, Remondo, Roca y los HH. Laborda y Montaner); se buscaba evitar tensiones internas en las comunidad. Y así comenzó el año 1887 que estuvo lleno de acontecimientos. El 17 de abril era consagrado en Concepción el nuevo obispo, Mons. Fernando Blaitt; el 15 de julio moría, tomando las riendas de la diócesis D. Vicente Chaparro. Ese mismo año celebró la Visita canónica quien ejercía de Vicario, daban comienzo las negociaciones para un nuevo colegio en Copiapó y para la construcción de una obra de planta en Concepción. Desde un primer momento la comunidad sentía la carga de la actividad parroquial; económicamente, si bien el grupo podía defenderse, le suponía dificultad aportar la contribución a España; el sometimiento a las autoridades de las diócesis, incluso en materias escolares, era demasiado duro por su rigidez lo que no permitía libertad de acción y actuación. Todo ello fue creando un clima de mal entendimiento interno y especialmente externo, lo que desembocó en un intercambio epistolar muy tenso entre el Sr. Chaparro y el P. Sors; el primero pedía fidelidad al contrato y en caso de rescindirlo que se devolviera el dinero prestado para que un grupo de religiosos llegara desde España; el segundo hacía valer los derechos de la Orden y argumentaba afirmando que dichos religiosos iban a seguir trabajando en la diócesis, al tiempo que manifestaba deseos de exonerarse de la carga contraída por no estar de acuerdo con las Constituciones del Instituto. La situación que se había creado en Yumbel llegó a Madrid y el P. Vicario general decidió mantener la palabra dada hasta el 1-3-1890. Con esta fecha se canceló el compromiso por mutuo acuerdo. Se mantuvieron, a pesar de todo, buenas relaciones de amistad no sólo con el Sr. Vicario sino también con el nuevo obispo, Mons. Plácido Labarca, y con toda la población. Tan sólo cuatro años estuvo abierto el primer colegio escolapio en Sudamérica; y uno de sus alumnos, fallecido en 1972, llegó a ser rector de la Universidad de Chile; se trata del prestigioso médico D. Armando Lagarríbel Moreno.

Bibliografía

• MAEZTU, F.: Historia de las Escuelas Pías en Chile. Santiago de Chile. Manuscrito, Santiago de Chile, s.f.. I, pp. 46-71.

Redactor(es)

• Fermín Maeztu, en 1990, artículo original del DENES I