LituaniaMateriales/Miedzyrzecz1702

[1702]

Francisco Lubomirski, citado más arriba, cuando iba a ver al Rey Augusto II a Varsovia, por mala suerte se rompió una costilla, y como le oprimía un dolor continuo, decidió fundar las Escuelas Pías en Miedzyrzecz, pero no mucho después falleció en Varsovia, y fue enterrado allí en la iglesia de los Misioneros. En su testamento dejó una cierta cantidad de dinero para la fundación. Como falleció sin hijos, Miedzyrzecz y todo su territorio pasó a su hermano Jorge Domingo Lubomirski, subcamarlengo real, el cual, cumpliendo el deseo de su hermano, fundó aquí un colegio de las Escuelas Pías. El 15 de febrero de 1702 firmó un contrato con el P. Ignacio Rogala Zawadzki, que era Provincial entonces, asignando 100.000 áureos polacos a dicha fundación, suma respaldada con sus bienes de Miedzyrzecz, Kilikijowa, Stodpunia y otros lugares. Este contrato está inscrito en los libros del reino y dice lo siguiente:

“Se establece este contrato según los puntos infrascritos entre el Ilmo. Sr. Príncipe Jorge Lubomirski, subcamarlengo real, por una parte, y por la otra el R.P. Ignacio de S. Estanislao (Zawadzki), Provincial de las Escuelas Pías, que no será modificado por ningún motivo, acerca de una fundación de raíz para el Instituto de las Escuelas Pías en la gran población de Miedzyrzecz, de la capitanía de Volinia, creando allí una comunidad.

Movido por su celo por el aumento de la gloria de Dios, el Ilmo. Sr. Príncipe Jorge Lubomirski, subcamarlengo real, tras madura deliberación, considerando que sería conveniente para la capitanía de Volinia, decidió fundar en Miedzyrzecz el Instituto de los RR.PP. de las Escuelas Pías, para que, de acuerdo con su naturaleza, pudieran ofrecer a los niños de origen noble y de otras condiciones una educación adecuada, tanto en la piedad como en las disciplinas escolares. Para que los citados Padres de las Escuelas Pías puedan trabajar en las escuelas sólida y convenientemente, de manera perpetua, declaro que quiero hacer una fundación para 18 religiosos de esa Orden de las Escuelas Pías e inscribir una suma sobre mis propiedades, que el Ilmo. Príncipe inscribirá en actas públicas con los requisitos necesarios, por un valor cuyo rédito sea suficiente para mantener a 18 personas. Esa suma será de 100.000 áureos polacos de moneda corriente.

Como es muy necesario para la honestidad y comodidad religiosa la clausura y una vivienda cómoda, el Ilmo. Príncipe promete construir una iglesia, un convento y unas escuelas convenientes, todo por medio de su piadosa liberalidad, y cuanto antes. Puesto que los RR. PP. Escolapios tienen por sus Constituciones como cautela que los fundadores no les obliguen a ejercer su ministerio antes de que todo esté preparado, el Ilmo. Príncipe no obliga a los citados Padres ni a enseñar en las escuelas, ni a llevar a cabo ninguna ceremonia pública o ritos eclesiásticos, excepto los que de momento se pueden hacer en la iglesia de madera, hasta que estén construidos por completo el convento, la iglesia y las escuelas. El Ilmo. Príncipe promete entregar también un huerto idóneo junto al colegio y una casita de campo con fábrica de cerveza y con todas las cosas necesarias. Además entregará lo necesario para las oficinas, es decir la biblioteca, el mobiliario de la iglesia, el ajuar de sacristía en tela y en plata, y todo lo necesario para adornar los altares. Puesto que el fundador quiere agradar a Dios, su munificencia no faltará.

Si llega un momento en que se separan las fundaciones de las Escuelas Pías y se forman otras provincias, el Ilmo. Príncipe advierte que en ese caso su voluntad es que la fundación de Miedzyrzecz pase solamente a la Provincia del Reino de Polonia, y quiere que su decisión quede clara en este acuerdo.

Por su parte el M.R.P. Provincial de las Escuelas Pías, en nombre de toda la Orden, y principalmente en nombre de toda la Provincia de Polonia, da eternas gracias al Ilmo. Sr. Príncipe fundador, mediante los puntos siguientes:

Cada día del año, mientras viva el Ilmo. Príncipe y después en sufragio de su alma, el colegio de Miedzyrzecz celebrará una misa por él.

Como el titular de la Iglesia que se construirá será San Antonio, durante la octava de la celebración del Santo los Padres Escolapios de Miedzyrzecz lo celebrarán solemnemente.

Además cada martes se cantará una misa votiva de San Antonio, según pide el Ilmo. Sr. Príncipe.

De todo lo referente a la fundación, con todos los puntos y cláusulas por separado, se informará al Ordinario del lugar. Como el P. Provincial sabe lo complicado que es obtener los réditos de un capital colocado en manos ajenas, promete en nombre suyo y de sus sucesores enviar sujetos aptos, para que cuiden bien de la economía y de las fincas en las cuales estará inscrito el capital de la fundación, para que las administren de tal modo que puedan vivir del trabajo de sus manos, sin causar luego ninguna molestia a los herederos a causa de las rentas de las Escuelas Pías de Miedzyrzecz. Y si el sucesor del Ilmo. Príncipe quisiera recuperar algunas de las fincas hipotecadas a favor de los RR.PP. Escolapios de Miedzyrzecz, no tendría ningún derecho a pedir y recuperar el usufructo de las fincas de que disfrutan los RR.PP. Escolapios a no ser que antes hubiera entregado al contado la suma oficialmente inscrita por ellas. Del mismo modo, antes de dejar esas fincas pagará también todo los que hubieran invertido en la mejora de las mismas, según el registro llevado por los RR.PP. Escolapios.

El R.P. Provincial de las Escuelas Pías ruega al Ilmo. Príncipe fundador que, entre otras precauciones legales, especialmente asegure mediante un instrumento legalmente registrado este documento. Y como una y otra parte están de acuerdo en todas y cada una de las cláusulas de este contrato, para observarlo perpetuamente, lo firman de buena fe. En Varsovia, a 15 de febrero de 1702. Jorge Lubomirski. Ignacio de S. Estanislao, Provincial de las Escuelas Pías de Polonia”.

El Provincial envió inmediatamente al sacerdote P. Nagrodzki, el cual llegando a Miedzyrzecz recibió la iglesia de madera del Rvdo. Borysiewikz, con permiso del administrador de la diócesis de Lutsk (habiendo fallecido el Obispo Prazimowski), el sufragáneo Pablo Constancio Dubrawski de Dubrawka, y pagó 200 áureos al mismo Rvdo. Borysiewikz por la casa que pertenecía a la iglesia. Además compró algunas casas a la viuda Mikuliczowa para vivienda provisional de los Padres. Pero el P. Pablo de Jesús Nagrodzki no permaneció allí mucho tiempo, pues el Príncipe Lubomirski, castellano de Cracovia, lo llamó junto a sí. En su lugar el P. Provincial envió al P. Gabriel de S. José (no conocemos su apellido), que poco después fue vuelto a llamar a causa de haber perdido 10.000 áureos.