San Mauro (IT) Colegio
Contenido
Datos
Demarcación Sicilia
(1680-1866)
Historia
La fundación del colegio escolapio fue pedida a los superiores de Roma y a la Sagrada Congregación por D. Vicente Greco, canónigo de la catedral de Cefalú y beneficiado de Santa María la Mayor de Roma, natural de San Mauro (Mesina). El colegio tendría seis religiosos y su dotación anual sería de 75 escudos (contrato del 26-5-1680) aprobado y confirmado por el patrimonio real (Palermo, 17-6-1680). Con esta misma fecha la cofradía del Santísimo Salvador cedió a los escolapios su iglesia con todos sus bienes muebles y estables y todo su ajuar. Tendrían médico y medicinas gratis, más otros censos, provenientes de un convento suprimido por Inocencio X y con esperanza de abundantes limosnas. Cumplidos todos los requisitos, el cardenal Carpegna, delegado a este fin, dio su aprobación el 31-10-1681. La región de San Mauro era fértil y el pueblo piadoso, y no había otro colegio, ni casa religiosa. Ño obstante, la realidad subsiguiente fue muy distinta: la tierra no dio lo esperado, ni abundaron las limosnas, y en 1692 la comunidad abandonó la casa. Entonces el pueblo ofreció a los Superiores condiciones económicas aceptables con fecha del 22-4-1694. Por medio del P. Mateo de Santa Úrsula, procurador del provincial, P. Felipe Giacalone de Santa María, se obtuvo del arzobispo de Mesina el regreso con fecha del 12-10-1694, previo consentimiento del clero, del pueblo y cofradías, levantándose acta de posesión el 26 de octubre del mismo año, confirmada por la curia arzobispal del 23 de diciembre. Tan laboriosa fue la gestación de este colegio que habría de pervivir dos siglos, aunque su vida y actividades no habrían de ser esplendorosas, sí fecundas para la población.
Como muestra del discurrir de la vida sin complicaciones del colegio baste anotar que en 1724 lo componían tres sacerdotes escolapios y tres hermanos operarios y un terciario. Funcionaban dos escuelas tan sólo. Se ayudaban para subsistir de entregas y limosnas, cerrando frecuentemente con pequeños déficits. En esta forma sobrevivió hasta la aplicación inexorable en Sicilia de las leyes de supresión de las Órdenes religionas en la Italia del Risorgimento (1866).
Bibliografía
- Regestum Provincia, 26.
Redactor(es)
- Claudio Vilá, en 1990, artículo original del DENES I