Bilbao (ES) Colegio Calasancio

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Escalera noble del colegio de Bilbao

Datos

Demarcación Vasconia

(1893- )

Fundación. Provincia de Castilla (1893-1933).

En 1893 la Provincia de Castilla decidió fundar un colegio en Bilbao. El 6 de septiembre llegaron el P. Marcelino Ortiz, Provincial, y el H. Leonardo Álvarez con objeto de elegir una casa en donde establecer las Escuelas Pías. Entraron en conversación con don Daniel de Aresti adquiriendo de éste un edificio en los terrenos de la anteiglesia de Abando; el edificio estaba en la manzana n. 30 del ensanche de Bilbao, calle Henao, letra D, esquina con la calle Heros y acababa de ser construido por don Daniel Escondrillas. Ahí comenzaron las clases el 17 de octubre. La primera comunidad estuvo compuesta por los PP. Antonio Ramos, presidente, Justo Barrasa, José Ortiz, el Cl. Juan José Almagro y los HH. Felipe Alonso y Leonardo Álvarez. Se impartía primera y segunda enseñanza, por lo cual desde los primeros momentos el inmueble fue insuficiente para las necesidades surgidas.

El 3-6-1901 el P. Eduardo Llanas, Vicario general autorizó la compra, a plazos, de los terrenos adjuntos al nuevo colegio. Así se comenzó por adquirir, el 18-6-1901, 3.615 metros cuadrados del caserío Arana a la sociedad «La Perla»; el 3-12 del mismo año, 432 metros cuadrados del caserío Atxerre al sacerdote e historiador Estanislao Jaime de Labairu. Las escrituras fueron firmadas por el rector José Manuel Raboso. En el verano de 1913 se inició la construcción del nuevo y amplio edificio, según los planos del arquitecto Alfredo Acebal. Dos años duró la obra. Para hacer frente a las muchas deudas el 13-5-1914 la comunidad decidió, por unanimidad, vender la casa en que vivían y tenían instalado el colegio. Finalmente el 12-6-1915 el nuevo edificio fue bendecido por el arcipreste de Bilbao, inaugurándose al comenzar el curso escolar 1915-1916. El nuevo colegio, de planta baja y dos pisos a lo largo de la calle Espartero, Recalde y Henao dio la posibilidad de ampliación para las clases de primaria, de segunda enseñanza e, incluso, de comercio y además para internado. Todavía en 1920 se ampliaron los terrenos. El P. Vicente Lascaray, rector, compró a la familia Alcocer Rivacoba los solares existentes en la calle Henao entre el antiguo y nuevo colegio, con lo que el solar propiedad de los escolapios alcanzó los 5.434 metros cuadrados. En 1926, según planos del mismo señor Acebal, se levantó otro piso, más por necesidad de cubrir las terrazas -poco acordes con el clima lluvioso de Bilbao- que por urgencia de espacios.

Provincia de vasconia.

En 1933, al formarse la Provincia de Vasconia, este colegio fue entregado a la misma por el P. Provincial de Castilla. Aquel mismo año los amigos del colegio fundaron la sociedad «Cultural vizcaína», para salvaguardar la enseñanza escolapia ante el cariz de las leyes de la República. Presidía tal sociedad el catedrático de derecho y exalumno del colegio don José Luis Goicoechea, más conocido por el nombre artístico, «Goico», con que firmaba sus dibujos. En julio de 1936, al pronunciarse el levantamiento militar, observando cómo se ponían las cosas, la comunidad decide entregar el edificio al servicio de las necesidades públicas, recibiendo en su primer momento a las familias evacuadas de Guipúzcoa, y ponerlo a disposición del gobierno vasco al constituirse éste el 7-10-1936. Por ello sirvió de alojamiento a los batallones del ejército vasco. Parte de la comunidad atendió una escuelita en Bakio y sirvieron como capellanes a los gudaris (1936-1937). Sirvió Bilbao de refugio y acogida a los escolapios que escapaban de Asturias y Santander; tras la toma de la ciudad (19-6-1937) el ejército incautó el edificio que fue dedicado a cárcel durante tres años. Durante ese período sólo pudo ser atendida una parte de los alumnos y de forma precaria en dos pisos del edificio Sota, en la prolongación de la Gran Vía. El 14-8-1940 pudo rescatarse el inmueble tras múltiples gestiones y en un estado lamentable.

Acomodados en el edificio propio de la Alameda de Recalde, fueron años de mucha vitalidad; a los estudios de primera, segunda enseñanza y comercio se añadieron en 1945 los de náutica; se daba así respuesta a las necesidades de numerosos alumnos de los pueblos de la costa que acudían al internado y que aspiraban a seguir la tradición marinera de la familia. Dichos estudios dependieron de la escuela oficial de náutica de Deusto.

En 1946 la comunidad estaba compuesta por 24 religiosos y el número de alumnos era de 685, de los cuales 60 eran internos.

La actividad religiosa y pastoral fue muy grande; estuvo en auge la Acción católica y, sobre todo, la Cruzada misional de estudiantes bajo el impulso del P. Feliciano Pérez Altuna; precisamente de este colegio salieron a Japón los dos primeros misioneros escolapios: el P. Feliciano, que era entonces rector, y el P. Pedro Luis Perea. A mediados de la década de los cuarenta y en torno a los exalumnos se creó la Cofradía de la Madre de Dios de las Escuelas Pías, mientras que en los alumnos la Congregación mariana. Igualmente se impulsaron los turnos de la Adoración nocturna «S. José de Calasanz» y «San Pompilio María». En 1946 se creó la asociación de los antiguos alumnos, siendo su primer presidente Ángel Corcostegui; a la sombra de la misma surgió el grupo de teatro «Calasanz» que a finales de los cuarenta tuvo aplaudidas actuaciones en Bilbao y provincia. Se imprimió la revista escolar «Nuestro colegio»; contó el colegio con escuela de bailes vascos, bajo la dirección del profesor Manu Gerrikabeitia, siendo uno de los pocos y escasos sitios que, después de la guerra civil, tenía grupo de danza. Enraizado en el pueblo, ha sido importante foco de cultura vasca; en su iglesia celebraban sus misas la Academia vasca hasta 1958; fue pionero en la reiniciación, tras la guerra, de la vieja tradición de los coros de Santa Águeda. En cuanto al deporte, tuvo importancia y relevancia el baloncesto, llegando su club, el «Águilas» a la máxima categoría nacional; animadores de este deporte fueron los PP. Juan Rández y Sebastián Galdeano.

En 1957 los alumnos eran 1.200, de los cuales 54 eran internos; ese año se levantó en el último piso una capilla para los alumnos, mucho más capaz que la existente. Tres años más tarde se amplió el internado en el último piso dándole una capacidad para 120 muchachos. Cuando en 1964 se suprimieron las clases de comercio, crecieron las de primera enseñanza, el bachillerato y el preuniversitario; de tal modo que en 1967 el alumnado llegaba a 1.560 muchachos. En 1970 se suprime el internado transformando los locales en gimnasios y mejorando la vivienda de la comunidad de los religiosos. Desde 1982 el colegio ha abierto sus aulas a la coeducación.

A pesar de las muchas mejoras que ha sufrido el inmueble a lo largo de los años, el inaugurado en 1915 quedó anticuado, insuficiente; ha sido necesario pensar en una remodelación profunda, encargando el proyecto al arquitecto don Pedro Ispizua.

Datos complementarios.

En la tarea educativa el colegio ha dado importancia a todo tipo de actividades al «aire libre»; a tal fin adquirió el caserío Iturralde, en el pueblecito llamado Arrazola, valle de Atxondo; su uso es múltiple y su servicio grande e intenso.

Funciona el movimiento scout con pujanza, siendo el grupo «Mikel Deuna» de los más veteranos implantados en Vizcaya.

Entre las publicaciones escolares la más constante ha sido la revista Nuestro colegio, que salió de 1948 a 1967, aunque con alguna interrupción; Agenda escolar de los cursos 1962-1963 a 1972-1973; Buho (multicopiada) de 1974 a 1976; Colé, algunos números sueltos de cuatro páginas de 1977 a 1979.

Entre los alumnos que pasaron por el colegio se cuentan: Pedro Arrupe Gondra, General de la Compañía de Jesús; los obispos Luis Martínez de Lejarza, Ignacio Orbegozo Goicoechea, Juan María Uñarte Goiricelaia; los pintores Juan de Aranoa, José María Uzelai; el futbolista Rafael Moreno Aranzadi «Pitxitxi»; el político y escritor Rafael Sánchez Mazas; el poeta Juan Larrea; y otros más.

Superiores

Persona Año
Antonio Ramos 1893
Melchor Rodríguez 1897
José Manuel Raboso 1900
Felipe Recio 1907
Ángel Vinagre 1908
Moisés Pérez 1912
José Ramón Sánchez 1913
Ramón Navarro 1913
Emilio Ruiz 1915
Vicente Lazcaray 1919
Luciano Moreno 1922
Arsenio Díaz 1928
Gonzalo Etayo 1933
Luis Arsuaga 1938
Feliciano Pérez-Altuna 1946
Luis Arsuaga 1950
Javier Vicuña 1952
Justo María Mocoroa 1955
Ángel Yaben 1958
Gregorio Valencia 1961
Víctor Pinillos 1964
Heliodoro Latasa 1967
Jesús Miguel Lesaga 1967
Javier Santamaría 1974
Inocencio Rozas 1976
Ángel González 1980
José Ignacio Alberdi 1982
Miguel Arratíbel 1983

Bibliografía

Redactor(es)

  • Javier Ortigosa, en 1990, artículo original del DENES I