Francesco Castelli

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Procedencia

Demarcación Toscana

Cualidades

Asistente General. Provincial. Venerable.

Fechas

Castiglon Florentino (Arezzo) hacia 1583, Roma 17-5-1657

Biografía

Después de haber conseguido el doctorado en ambos derechos, se dirigió a Roma donde fue un asiduo oyente de las predicaciones del P. Pedro Casani. Se puso bajo su dirección y llegó a ser sacerdote. Algunos meses después de la constitución de la Congregación Paulina entró en las Escuelas Pías. Antes de la profesión, en 1619, fue nombrado Maestro de novicios en sustitución del P. Casani. Duró en el cargo hasta 1623. El resto de la vida de Castelli se puede dividir en tres períodos: Liguria 1624-1629, Florencia 1630-1638, Roma 1639-1657. En Liguria fue Maestro de novicios, Ministro de Savona y Provincial desde 1625. En Florencia fue Provincial. En Roma continuó en el cargo de Asistente General que tenía desde 1622, hasta que en 1643 fue suspendido junto con toda la Congregación General. Después fue Superior del noviciado y en 1656 de nuevo, nombrado Asistente General. Hombre de inteligencia no común, fue siempre un fiel colaborador de Calasanz incluso cuando sus puntos de vista diferían notablemente de los del Fundador. Quería que los escolapios tuviesen una buena formación espiritual e intelectual y se aplicasen a los estudios literarios, científicos y teológicos. Tomó la iniciativa, aprobada por Calasanz, de enviar a los hermanos más inteligentes de la Provincia de Génova a la escuela del P. Antonio Santini, somasco y discípulo de Galileo. Y también envió a tres a Milán para que aprendiesen directamente de Scioppio el nuevo método de enseñar latín que él proponía. En Florencia favoreció los contactos de los nuestros con Galileo, e instituyó la Escuela de los Nobles que Calasanz aceptó no sin dificultades. Fue favorable a los Clérigos Operarios y estuvo siempre de su parte. Entre las cosas en que divergía de Calasanz estaba la costumbre de acompañar a los alumnos a sus casas después de la escuela; le parecía que esta práctica tenía dos inconvenientes principales: apartaba a los maestros del estudio y de las prácticas de piedad, amenazaba hacer despreciable el Instituto de las Escuelas Pías. También hubiera preferido un gobierno más enérgico por parte del Fundador, y lamentaba que siempre le tocaba a él llamar al deber a los indisciplinados. Llamado a Roma en diciembre de 1638, llegó al comienzo de 1639. Residió primero por varios años en San Pantaleón y estuvo entre los arrestados con Calasanz por el Santo Oficio. En 1643 los nuevos Superiores lo nombraron Rector del noviciado y mantuvo el cargo aun después de la reducción de Inocencio X. Precisamente en aquellos tiempos Castelli compiló varios escritos de gran interés histórico, de los cuales sólo algunos, y no los más importantes, fueron publicados por el P. Santha. En ellos Castelli defiende el gobierno de Calasanz; manifiesta sus ideas sobre el modo en el cual se debe vivir la vida religiosa en las Escuelas Pías; hace la apología del Instituto; busca obtener un Cardenal Protector aun durante el período de la reducción. Murió por una herida recibida en la sien mientras trataba de separar a dos que reñían con cuchillos. Castelli es una de las figuras que deberían ponerse bien a la luz para clarificar la historia del comienzo de las Escuelas Pías.

Obras

  • Manuscritos en el Archivo General, especialmente: Reg. Cal. 14, 60 (son siete)
  • Cartas: S 5, 565-612; S 6, 650-664.

Bibliografía

Redactor(es)

  • Giovanni Ausenda, en 1983, artículo original del DENES II