Revisión de 09:50 20 oct 2014

Datos

Demarcación Colombia - Ecuador

(1953- )

Antecedentes históricos.

La causa de la fundación estuvo en el deseo de la ciudad de Cúcuta por tener un colegio de selección. Lucio Pabón Núñez, político del departamento norte de Santander, conocía el colegio de Bogotá y quiso otro similar para Cúcuta. Siendo embajador de Colombia en Portugal, viajó a Madrid y habló con el P. Provincial de Castilla, P. Juan Pérez. El resultado de estas conversaciones se puso en conocimiento de ciudadanos prominentes de Cúcuta: D. Miguel García Herreros, D. José Rubio y el sacerdote D. Daniel Jordán. Estos se pusieron en comunicación con el P. Eliseo Díaz, rector del colegio Calasanz de Bogotá, que viajó a Cúcuta y tuvo una entrevista con el administrador apostólico de Nueva Pamplona, Mons. Norberto Forero. Con su aprobación se creó la «Sociedad de amigos del colegio Calasanz». La formaron los señores antes mencionados como presidente, secretario y asesor eclesiástico, respectivamente, y otros.

Desarrollo histórico.

El colegio empezó en un edificio de la calle 13, propiedad del departamento, que lo cedió libre de impuestos por 10 años, en los cuales los escolapios se comprometieron a tener construido el edificio. Al final de esta década estaba ya funcionando en la nueva sede, la actual, en el barrio Blanco. El año 1958 empezaron las obras. Bendijo la primera piedra Mons. Luis Pérez Hernández, primer obispo de Cúcuta, el día 28 de junio. Al año siguiente, 1959, empezó a funcionar el bachillerato en los nuevos locales; la primaria continuó en el local primitivo de la calle 13. El año 1960 pasó al nuevo edificio todo el colegio. La primera sede no tenía condiciones pedagógicas. La segunda, con campos de deportes y patios de recreos, con salones amplios y con todas las condiciones pedagógicas necesarias para impartir una buena enseñanza. Parte del terreno fue regalada, otra comprada a Shaif, un libanés muy rico de Cúcuta, y otra parte cedida por el municipio, terreno este último que provocó pleitos. Un hito importante ocurrió en 1960, cuando salieron los primeros bachilleres; la buena preparación que habían recibido les permitió ser admitidos, casi en su totalidad, en las Universidades tanto de Bogotá como de Bucaramanga. El paso siguiente, en la realización del ideal educativo del colegio, se dio el año 1969, extendiendo la educación a los marginados. Se eligió el barrio «Juan Atalaya» en la carretera al Zulia. Esta iniciativa la tomó la comunidad siendo rector el P. Leonardo Ordás. Este interesó a los antiguos alumnos del Calasanz. En los años setenta siguiendo las directrices de toda la Viceprovincia, realizó un gran esfuerzo para promover la llamada «educación personalizada», que significaba un avance pedagógico. Algunos profesores laicos de Cúcuta fueron a Medellín y Bogotá a formarse en cursos especializados; se trajeron especialistas en pedagogía y psicología a Cúcuta y el experimento, con fortuna varia, ha seguido adelante. Se comenzó en primaria en 1973 y en bachillerato en 1978.

También en esta década se ensayó otro método educativo-pastoral: la creación de un movimiento juvenil de educación cristiana extra-escolar. Se llamó «Baibaj».

En 1974 la Congregación viceprovincial empezó a considerar la situación económica del colegio. Las dificultades eran grandes ya que el Gobierno no permitía subir la pensión de los niños en proporción a la inflación. Se llegó a la conclusión de cerrar. En 1975, con la aprobación del P. General, se les comunicó a los padres de familia la intención de retirarse; hubo asamblea general con el siguiente acuerdo: ellos llevarían la economía y los escolapios la dirección pedagógica y espiritual, pagándoles como a profesores. Se hizo un contrato, que ha regido, aunque modificado, hasta la fecha. El gerente, que hoy tiene «carta de hermandad», ha sido D. León Upegui.

En 1979 se celebraron las bodas de plata con grandes solemnidades, entregando «carta de hermandad» a Javier Ramírez, Roque Fernández y al anteriormente mencionado. Con esta ocasión el Gobierno departamental concedió al colegio la medalla «José Eusebio Caro», la más alta distinción a un centro educativo en el departamento. El año 1980 el Gobierno nacional instituyó una prueba entre los alumnos de sexto de bachillerato de toda la nación; el colegio consiguió el primer puesto en el departamento y también en años sucesivos.

Movimiento juvenil «baibaj»

Surge del convencimiento que tenían los religiosos de la Viceprovincia de que las vocaciones nacen cuando los jóvenes ven a los religiosos dedicados a una pastoral directa, como complemento del trabajo del colegio. Comienza en 1976 con un grupo de alumnos del colegio Calasanz, basado en la estructura del movimiento juvenil cristiano «Almatá» de Medellín. En enero de 1977 se tiene el primer cursillo de promoción comunitaria en la ciudad de Bucaramanga, en donde queda conformado el movimiento. Se llamó «Baibaj», palabra de los indios motilones que significa: «¿Cómo te llamas?». -El nombre en el ser humano y en el cristiano es signo de la individualidad y originalidad en el crecimiento-. Ha estado alojado en varias sedes, casas alquiladas, todas precarias, por falta de recursos económicos. El objetivo es formar cristianos comprometidos con la historia que, introducidos en un proceso de personalización, desemboquen en un compromiso con «el otro». Para cumplir este objetivo el movimiento consta de un pre-movimiento en el que se pretende descubrirse, descubrir al otro y a Dios; luego un cursillo de promoción y compromiso.

Los medios empleados son la vivencia y profundización de la fe. Han sido directores: Manuel Jiménez (1976-1982) y Celestino Pulido (1982).

Este mismo movimiento juvenil mantuvo una acción apostólica en un valle del municipio de Gramalote, bajo la modalidad de «campamento misión».

Superiores

Redactor(es)

• José Mozuelos, en 1990, artículo original del DENES I