Diferencia entre revisiones de «Palermo (IT) Real Colegio Carolino-Calasancio»
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Última revisión de 14:45 5 dic 2014
Aviso de contenido
Este texto es el original publicado en su día en el DENES. No se ha hecho sobre él ninguna rectificación. Su contenido, pues, puede no reflejar la realidad actual |
Contenido
Datos
Demarcación Sicilia
(1773-1866)
Historia
A los 25 años de haberse cerrado en Palermo el Real colegio escolapio de la Reina (1748), el Provincial, P. Mariano Boccia abrió otro, destinado igualmente a la educación de nobles (1773). Arrancó bien, con óptimo profesorado de la Provincia de Sicilia; el número de colegiales fue en aumento. A los cinco años gozaba ya de gran fama. Por ello el rey siciliano, que aspiraba a controlar totalmente la enseñanza, en especial la de los nobles, por real decreto cambió el nombre de colegio escolapio de nobles en colegio Carolino-Calasancio (1778). Su director se llamó «gobernador del colegio» según los nuevos estatutos, que concedían perpetuamente la dirección a los escolapios. El cambio supuso modificaciones, pero eran aceptables para las Escuelas Pías. Los religiosos que trabajaban en el colegio canónicamente dependían del colegio palermitano existente desde los días de San José de Calasanz, y que era sede provincialicia y también del noviciado. Pero al crecer el Carolino-Calasancio se impuso la independencia y en 1790 se consideró como casa canónicamente formada. Su crédito constante le permitió superar las circunstancias difíciles subsecuentes a la revolución francesa. Año tras año celebraba sus academias o veladas solemnes con ocasión de la distribución de premios. En 1785 se pretendió por los responsables del «Colegio Fernandino», de fundación regia, existente en Palermo, que el «Carolino-Calasancio» solo pudiera admitir nobles de segundo rango, lo que se demostró ser enteramente falso «de jure» y «de facto». De hecho antes de 1778 se educaban en el «Calasancio» Luis Naselli conde del Comiso, Joaquín de Requesens, conde de Burcemi, Antonio Yermini, marqués de Montemaggiore y su hermano Domingo, José Gallego, príncipe de Militello y su hermano Luis, Gonzalvo Asmundo Paterno, primogénito del marqués Sassa, un hijo del príncipe de Comitini, otro del príncipe de Aragón, etc. «De jure» el real despacho del 1-8-1778 confirma y autoriza al colegio Calasancio, como renovación y continuación del que existió de 1737 a 1748. Por un real despacho de 25-10-1800 los religiosos del Carolino-Calasancio debían ser preferidos, en igualdad de condiciones, para ocupar los cargos de la Orden. Por disposición del mes anterior los réditos del Colegio Calasancio (anterior) quedaban unidos al del Carolino formando uno nuevo. Eso sí, en 1778 se impuso al Carolino-Calasancio admitir 20 plazas gratuitas (a pagar por el Gobierno) para jóvenes de nobleza de segundo rango sin ello obstar a los derechos y costumbres del internado escolapio. Quedaba bajo la vigilancia de una diputación regia para ejercer control estatal, muy propio de los recelosos Borbones. La vida de este colegio perduró más o menos próspera hasta que al implantarse la supresión de las Órdenes religiosas, se apoderó de él el Gobierno italiano retirándose los escolapios que lo habían regido casi un siglo.
Bibliografía
- Per la solenne distribuzione dei premi nel Collegio Carolino-Calasanzio. Discorso (Palermo 1845)
- Fogli di lumi: en Istruzione per la Noble e Civile gioventù che desidera entrare nel Real Convitto Calasanzio dei Chierici Regolari delle Scuole Pie (Palermo 1773)
- Regestum Provincia, 28.
Redactor(es)
- Claudio Vilá, en 1990, artículo original del DENES I